Tras diez años fuera de Japón, durante los que ha vivido y trabajado en lugares como Bruselas, Amsterdam, Ibiza o Barcelona, la exquisita cocina japonesa de Sean llega a Las Palmas de Gran Canaria. Aka, así se llama su restaurante, significa rojo en japonés. Con un ambiente que nos recuerda más a un sushi bar que a un restaurante, Aka abrió sus puertas hace apenas dos meses en la calle Isla de Cuba y su éxito no ha hecho más que crecer. Un éxito, todo hay que decirlo, más que merecido. La cocina y el trato son exquisitos. Si viven o pasan por la isla y les gusta la comida japonesa, no pueden perderse este lugar. Si van, esto puede que les suene raro, pero pidan la hamburguesa. Es una de las creaciones de Sean y les aseguro que no les defraudará.

Interiorista antes que chef, Sean no solo diseñó todas las mesas del restaurane, sino que además las fabricó. La mayoría del resto del mobiliario lo adquirió en Ikea.  

Lo del Superman y los adornos del techo no forma parte de la decoración habitual, sino de una fiesta de disfraces que se celebró hace poco con motivo del carnaval, que este año está dedicado en mi ciudad al mundo del cómic.